¿Y las palabras frívolas?
Carácter
marzo 17, 2025
¿Cómo hablan los que quieren parecerse más a Jesús cada día? ¿Qué tipo de palabras salen de sus bocas? ¿De qué conversan cuando están juntos? “Pero yo les digo que en el día del juicio todos tendrán que dar cuenta de toda palabra ociosa que hayan pronunciado” (Mateo 16:36, NVI).
“Pero yo les digo que en el día del juicio todos tendrán que dar cuenta de toda palabra ociosa que hayan pronunciado” (Mateo 12:36, NVI). Este versículo se inscribe en un contexto interesante. En los versos anteriores Jesús explica que el corazón es COMO un cofre donde se esconden cosas buenas o malas, y que la palabra es el medio para sacar lo que se guarda en el corazón. “De la abundancia del corazón habla la boca” es la conclusión del Maestro. Y termina diciendo que en el día del juicio los hombres darán cuenta de toda palabra frívola que hayan dicho.
Hay tres maneras de ver este texto. La primera es tener miedo de las consecuencias en el día del juicio y tratar desde hoy de no decir palabras frívolas.
La segunda es razonar de la siguiente manera: “Como los que tienen buen corazón hablan cosas buenas, entonces a partir de ahora solo hablaré cosas constructivas.
La tercera es ir a Jesús y decirle: “Señor, el hecho de que hable frivolidades es una prueba de que mi corazón es malo y está lleno de pensamientos sucios. Por favor, vive en mí y purifica mis sentimientos y pensamientos. Santifica mi corazón diariamente a través de la presencia de tu Espíritu Santo”.
Y si el hombre a partir de ese momento vive una vida de comunión permanente con Cristo, los pensamientos de Cristo se convertirán en los suyos y las palabras que salgan de su boca serán naturalmente palabras edificantes.
Constantemente hemos puesto ante nosotros y ante la iglesia los ideales de la vida del cristiano, pero rara vez hemos tratado de mostrar los medios por los que se vive esta vida ideal.
En la Biblia nunca encontramos el problema sin la salida, el ideal sin el camino para alcanzarlo.
En el versículo de hoy, Jesús dice: “Déjame resolver el problema del corazón, sanar los pensamientos, y entonces vuestras palabras reflejarán la pureza de sus sentimientos santificados por mi presencia.
Dios quiere que sus hijos se asemejen más a él cada día, incluso en el tipo de conversación que mantienen.
Autor: Alejandro Bullón
La publicación original de este artículo se encuentra en la página web: https://biblia.com.br/perguntas-biblicas/e-as-palavras-frivolas/
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