Los querubines en el templo y la adoración de imágenes
Santuario
marzo 24, 2023
Este santuario era una “símbolo” (Hebreos 9:9, “figura” RVA-2015, “ilustración” NTV), una “sombra de las cosas celestiales” (Hebreos 8:5); es decir, apuntaba al sacrificio sustitutivo de Cristo en el Calvario y su obra como mediador en el santuario celestial (Hebreos 8:1-2; 9:23; 4:16).
Dios ordenó a Moisés que construyera un santuario para que el Señor habitara en medio de su pueblo (Éxodo 25:8). Dios mismo entregó las instrucciones para la construcción del santuario (cf. Éxodo 25-31; 35-40). Dios dijo a Moisés: “Asegúrate de hacer todo conforme al modelo que te mostré en el monte” (Éxodo 25:40, PDT; 26:30; Hebreos 8:5).
El lugar santísimo del tabernáculo terrenal era una pálida representación de la realidad del trono de Dios en el santuario celestial (Apocalipsis 11:19; Isaías 6:1-3). Además de ordenar que se hicieran dos querubines de oro para el lugar santísimo (Éxodo 25:18-24), Dios también ordenó que se hicieran diez cortinas de lino con querubines (Éxodo 26:1; 36:8).
Este santuario era una “símbolo” (Hebreos 9:9, “figura” RVA-2015, “ilustración” NTV), una “sombra de las cosas celestiales” (Hebreos 8:5); es decir, apuntaba al sacrificio sustitutivo de Cristo en el Calvario y su obra como mediador en el santuario celestial (Hebreos 8:1-2; 9:23; 4:16). El santuario terrenal, tanto el de Moisés como el de Salomón, se cumplió como esta “figura” y “sombra de las cosas celestiales”. Cuando Cristo murió, el velo del templo se rasgó, lo cual evidencia la transitoriedad de los ritos en el templo terrenal y apunta al nuevo pacto en el santuario celestial, donde Cristo está sentado a la derecha del Padre (Hebreos 8:1-2; 6, 10).
Dios se manifestaba en el tabernáculo terrenal y se manifestó varias veces en el templo de Salomón. Algunos argumentan que los querubines tallados en oro en el lugar santísimo y los querubines en las cortinas del santuario son “razones” bíblicas para el culto a los santos a través de imágenes esculpidas. Nótese que el contexto del santuario no permite tal abominación, y Dios nunca contradiría su ley, que establece lo siguiente:
“No te harás ninguna imagen, ni ninguna semejanza de lo que está arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás ante ellas ni les rendirás culto, porque yo soy el SEÑOR tu Dios, un Dios celoso que castigo la maldad de los padres sobre los hijos, sobre la tercera y sobre la cuarta generación de los que me aborrecen. Pero muestro misericordia por mil generaciones a los que me aman y guardan mis mandamientos” (Éxodo 20:4-6).
Por lo tanto, entendemos que el santuario era una representación del trono de Dios en el santuario celestial con el propósito de ilustrar el plan de salvación que señalaba la muerte sustitutiva de Cristo y su ministerio sacerdotal en el santuario celestial.
Autor: Escuela Bíblica
La publicación original de este artículo se encuentra en la página web: https://biblia.com.br/perguntas-biblicas/os-querubins-no-templo-e-adoracao-de-imagens/
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