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¿Quién es Miguel?

Jesús

marzo 31, 2023

En Apocalipsis 12:7, Miguel y Satanás son presentados en antagonismo directo, en un conflicto cósmico que se originó en el cielo y se extiende a lo largo de la historia de la humanidad (Apocalipsis 12:1-17; 20:1-10).

En las tradiciones judía y cristiana se ha especulado mucho a lo largo del tiempo sobre la naturaleza y la labor de los ángeles, así como sobre la identificación del arcángel Miguel. En la literatura pseudoepigráfica, por ejemplo, Miguel es presentado como uno de los siete arcángeles celestiales (1 Enoc 20:1-7; 81:5; 90:21-22; Tobías 12:15), y uno de los cuatro que están más cerca del trono de Dios (1 Enoc 9:1; 40:1-10; 54:6; 71:8, 9 y 13). Estas tradiciones extrabíblicas han sido utilizadas por muchos comentaristas contemporáneos para alegar que Miguel no es más que un ángel, creado por Dios, que cumple la función de líder principal de las huestes angélicas.

En la Biblia, Miguel, cuyo nombre significa “¿Quién es como Dios?”, es descrito como “arcángel” (Judas 9), el líder de las huestes angélicas en el conflicto contra Satanás y los ángeles malvados (Apocalipsis 12:7), “uno de los principales príncipes” (Daniel 10:13), “tu príncipe” (Daniel 10:21) y “el gran príncipe protector de tu pueblo” (Daniel 12:1, NVI). Un análisis detenido de estas expresiones dentro del contexto bíblico deja claro que Miguel se presenta en el texto sagrado como un Ser divino, cuyas características reflejan la gloria mesiánica del Antiguo Testamento.

Miguel se presenta en Judas 9 como el “arcángel” que, en la disputa “por el cuerpo de Moisés” (véase Deuteronomio 34:5 y 6), se enfrentó al diablo con las siguientes palabras: “¡El Señor te reprenda!”. Esta alusión identifica a Miguel como el “Ángel del Señor”, quien, en la disputa sobre el “sumo sacerdote Josué”, dijo de igual manera al diablo: “Jehová te reprenda, oh Satanás” (Zacarías 3:1 y 2). Es interesante observar que, tanto en Zacarías 3 como en Génesis 22:11-18; Jueces 6:11-24; 13:2-22 y Hechos 7:30-33 y 38, ¡se identifica al Ángel del Señor como el propio Señor!

En Apocalipsis 12:7, Miguel y Satanás son presentados en antagonismo directo, en un conflicto cósmico que se originó en el cielo y se extiende a lo largo de la historia humana (Apocalipsis 12:1-17; 20:1-10). El Nuevo Testamento deja claro que este conflicto se polariza entre Cristo y sus seguidores y Satanás y sus seguidores (véase Mateo 4:1-11; Juan 12:31 y 32; 14:30; Efesios 6:10-20; Colosenses 1:13 y 14).

Ya en Daniel 10:13 y 21; 12:1, Miguel es llamado “príncipe” y “el gran príncipe”. En todo el resto de la Escritura, cuando no se aplica a seres humanos, el título “príncipe” se utiliza exclusivamente para Cristo (Josué 5:14 y 15; Isaías 9:6; Daniel 8:11 y 25; 9:25; Hechos 5:31) o para Satanás (Juan 12:31; 14:30; 16:11; Efesios 2:12), pero nunca para ningún otro ser angélico. En Josué 5:14 y 15, el Señor se presentó a Josué como el “príncipe del ejército del Señor”, aceptando la adoración, lo que sería una blasfemia si este príncipe fuera solo un ángel (véase Mateo 4:10; Apocalipsis 22:8 y 9). En el propio libro de Daniel, Cristo también es llamado “príncipe del ejército” (Daniel 8:11) y “Príncipe de los príncipes” (Daniel 8:25).

Una de las características básicas del contenido profético del libro de Daniel es la “repetición para amplificar”. Cada una de las cuatro grandes secciones proféticas del libro emplea diferentes símbolos para describir la misma secuencia profética, que siempre culmina con la gloriosa manifestación de Cristo para establecer su reino eterno. Esta manifestación de Cristo está simbolizada en Daniel 2, por la piedra cortada sin manos (versículos 34 y 35; 44 y 45; compárese con Hechos 4:11; Efesios 2:20; 1 Pedro 2:4-8); en Daniel 7, por la aparición del Hijo del Hombre (versículo 13; compárese con Mateo 16:27; 24-27 y 30; 25: 31 y 32); en Daniel 8, por la aparición del Príncipe de los príncipes (versículo 25; compárese con Apocalipsis 19:11-21); y, finalmente, en Daniel 10-12, por la venida de “Miguel, el gran príncipe protector de tu pueblo” (capítulo 12:1, NVI; compárese con el Salmo 91). Afirmar que Miguel es un simple ángel significa romper el paralelismo estructural del libro.

Basándonos en las similitudes bíblicas entre las características de la misión del Arcángel Miguel y las de Cristo, podemos estar de acuerdo con otros comentaristas, como Juan Calvino y Matthew Henry, que identifican a Miguel como Cristo y no como un simple ángel (o un ser creado).

Autor: Escuela Bíblica

La publicación original de este artículo se encuentra en la página web:  https://biblia.com.br/perguntas-biblicas/quem-e-miguel/

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