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Dios habló

Jesús

octubre 24, 2025

Cuando Dios habla, no silencia la razón humana, como algunos podrían pensar, sino que la liberta y garantiza una perspectiva más amplia con nuevos significados y posibilidades.

Amor Rodor

“Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad” (Juan 1:14).

Las Escrituras dan testimonio de que Dios no solo existe, sino que se comunica. Dios habló en el pasado y sigue hablando a través de lo que ha revelado. Cuando Dios habla, no silencia la razón humana, como algunos podrían pensar, sino que la liberta y garantiza una perspectiva más amplia con nuevos significados y posibilidades. Lo que se ofende cuando Dios habla es la soberbia de la razón humana, que pretende dar al hombre atributos que en realidad no tiene, lo que se observa en sus intentos frustrados de ofrecer “sentido” a la vida con “respuestas” superficiales.

Debido al “ruido” y a la publicidad que nos rodea, muchos piensan que “sabemos demasiado”. Pero ¿será cierto? ¿Realmente nos estamos haciendo las preguntas correctas sobre la vida? Mira los comentarios de científicos, economistas, políticos, abogados, artistas, sociólogos, presentadores de televisión, ejecutivos, médicos, psicólogos, filósofos, comentaristas deportivos, ecologistas y muchas otras voces. Sin menospreciar lo que es verdaderamente genuino y auténtico en el hombre, parece que ni siquiera estamos seguros de la esfera de la vida donde residen las cuestiones importantes. En medio de tanta variedad de “opiniones” y “conjeturas”, nos sentimos aún más confundidos y desorientados por las contradicciones. ¿Qué es lo más importante: la seguridad? ¿El alimento? ¿El asilo? ¿La salud? ¿El matrimonio? ¿El trabajo? ¿La familia? ¿La posición social? ¿Los placeres? ¿Cómo podemos llevarnos bien con los vecinos u otras personas con quienes compartimos cada día? ¿Qué es lo más decisivo en la vida? Estas son solo algunas de preguntas. Pero ¿cuál es la más importante?

Sin Dios y su Palabra, el hombre está vagando en un territorio desconocido. Dios habla a través de las glorias de la naturaleza, la conciencia y el Espíritu Santo. A través del testimonio de las Escrituras y, sobre todo, del Verbo Encarnado, que es Jesucristo, podemos escuchar y aprender del Eterno lo que es realmente importante en el corto espacio de nuestra presencia en el planeta tierra.

Autor: Amin Rodor es PhD en Teología Sistemática por la Universidad de Andrews, EE. UU.

La publicación original de este artículo se encuentra en la página web: https://biblia.com.br/perguntas-biblicas/deus-falou/

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