¿Cómo lidiar con el abuso sexual dentro de casa? Parte 1
Sexualidad
mayo 11, 2023
Por desgracia, el número de niños que sufren abusos en sus propios hogares a manos de sus familiares es muy elevado. En ocho de cada 10 casos registrados, el agresor es conocido por la víctima. Esta persona, en general, es alguien en quien el niño confía.
Por tal razón, estas personas casi siempre acaban convenciendo al niño para que participe en este tipo de actos mediante la persuasión, las recompensas o las amenazas. Los agresores pueden ser el padre, el padrastro, los hermanos o incluso las madres y hermanas. Las mujeres también abusan sexualmente de niños y adolescentes, aunque la mayoría de los abusadores son hombres.
Los casos de abuso en el propio hogar y por parte de los familiares suelen comenzar lentamente a través de la seducción sutil (a través de una mirada maliciosa, piropos con contenido seductor y malicioso), pasando a la práctica de los “cariños” que rara vez dejan lesiones físicas. Es muy común que el niño se sienta muy confundido por todo esto, porque el maltratador suele mostrarse realmente cariñoso, pero aprovecha esos momentos de afecto para abusar del niño.
¿Qué actitudes implican el abuso sexual?
Implica tocar la boca, los genitales, las nalgas, los pechos u otras partes íntimas de un niño —o forzar o animar a un niño a tocar a un adulto— con el fin de satisfacer los deseos del agresor. Hacer o intentar hacer que un niño participe en un acto sexual. Forzar o animar a un niño a participar en actividades sexuales con otros niños o adultos. Exponer al niño a actos o exhibiciones sexuales con el fin de estimularlo o gratificarlo sexualmente. Utilizar al niño en espectáculos sexuales como la fotografía, el juego, la filmación o el baile, sin importar si el material es obsceno o no. Algunos comportamientos del familiar que pueden apuntar a un posible abuso son los siguientes:
1. Miradas maliciosas y seductoras hacia el niño y su cuerpo.
2. Interés exagerado por mantener demasiado tiempo al niño en el regazo.
3. Interés exagerado por querer estar a solas con la niña, ofreciéndose a cuidarla.
4. Encontrar a esta persona en situaciones extrañas, como acariciar al niño bajo las mantas o en un rincón de la casa, aunque no utilice la fuerza física.
5. Que el adulto insista mucho en sostener, abrazar o acariciar al niño.
Lógicamente, uno de estos comportamientos aislados no es indicativo de maltrato, pero la combinación de ellos sí puede serlo, junto con la observación del comportamiento del niño… (continúa).
Autor: Escuela Bíblica
La publicación original de este artículo se encuentra en la página web: https://biblia.com.br/perguntas-biblicas/como-lidar-com-o-abuso-sexual-dentro-de-casa-parte-1/
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